top of page

De creerte el mejor a volver a empezar



Cuando alguien me dijo por primera vez que no le gustaban mis montajes, pensé que era una broma. Toda la vida me habían dicho que era el mejor montador, un crack haciendo jingles y cuñas de radio. Llevaba años editando audio y creía que era el mejor.

El primer podcast en serio en el que trabajé me cambió todo. Trabajé en La Fortuna, el podcast oficial de la serie de Amenábar. Ahí me di cuenta de que no tenía ni idea.

El podcast nació como complemento de la serie de Alejandro Amenábar para Movistar Plus+. Era un proyecto transmedia, con entrevistas, análisis y todo un universo sonoro que acompañaba la historia de la serie. Para mí, fue un antes y un después.

Venía de muchos años de radio. Las cosas en la radio se hacen a toda velocidad, para ayer, y no te fijas tanto en el detalle. En la radio aprendes a resolver rápido, pero también te acostumbras a un sonido muy comprimido, me atrevería a decir que rozando la saturación. Cuando pasas al mundo del podcast, eso no funciona igual.

Me costó mucho entender lo que significaba realmente editar para contar una historia. La Fortuna me obligó a cambiar mi forma de trabajar por completo, a dejar atrás Vegas Video, ese software de edición de toda la vida, y empezar desde cero con Pro Tools Studio. Ese verano estuve trabajando sin parar.


Esto me recordó por qué empecé a trabajar con Vegas Video. Allá por 1995, Sonic Foundry lanzó Sound Forge. Para muchos, fue el primer gran software de edición de audio digital. Y para mí, fue el principio de todo. Nos pareció una aparición divina.

Pasaba horas con él: recortando, normalizando… era fácil y divertido. Pero Sound Forge no era multipista: solo podías mezclar unas pocas pistas desde el mixer, y al final todo acababa rebotado en una sola. Aun así, era hipnótico, con sus efectos chorus, pitch shift

Más tarde apareció Vegas Video, y lo revolucionó todo. Por fin podías trabajar en multipista, mover clips como si fueran piezas de puzle y escuchar todo a la vez. Estamos hablando de 1999. Aunque naciera como editor de vídeo, editaba audio con una rapidez y una precisión que entonces parecían magia. Cortar, mover, exportar. Todo en segundos.

Durante años me manejé con Vegas Video (después Sony Vegas) para todo: cuñas de radio, megamixes y hasta programas enteros.

Aun así… sigo echando de menos a mi querido Sony Vegas. No hay ninguno como él, la verdad. Eso, y Napster, me dieron la vida 😅


A veces no se trata de aprender más, sino de desaprender lo aprendido. Yo venía de la radio, de hacer las cosas a mil por hora, sin parar a escuchar. Y cuando llegué al mundo del podcast, me di cuenta de que estaba sordo. No de oído, sino de atención.


Tuve que volver a escuchar de verdad: los silencios, las respiraciones, los pequeños ruidos que hacen que una historia suene viva. Reaprender a oír lo que siempre había estado ahí.

🎙️ Aprendí que editar no es cortar

👉 Todo lo que sé lo he volcado en www.localreset.com/masterclass


 
 
 

Comentarios

Obtuvo 0 de 5 estrellas.
Aún no hay calificaciones

Agrega una calificación
bottom of page